jueves, 25 de agosto de 2011


LXXXI

Sigo mirando las estrellas,
Suspirando por su luz titilante,
Aspirando a ser una de ellas,
En ese firmamento que las acoge….

Deseo ser arropada con su manto,
Aterciopelado de la luz de la noche,
Deseo sentir la calidez,
Del llanto de ese río de luces,
Que recorre el lienzo de la oscuridad,
Dando una guía al caminante,
El cual va perdido en su melancolía,
Dulce ensueño que no se olvida,
Que no se pierde  aunque se desespere…

Una lágrima resbala,
Se deja caer solitaria,
Recordando en cada estrella,
A quien tuve en el pasado,
A quien perdí en aquellos días,
Que con sus sonrisas me trajo alegrías,
Y con su marcha la tristeza.

Extiendo la mano al cielo,
Suspirando en el desconsuelo,
Son sueños sin cumplir,
Plegarias por escuchar,
Decepciones que deje llegar,
Es triste decir,
Que por no decidir,
Un mal yo causé sin saber,
Que por amar,
Yo permití,
A una sombra hambrienta llegar,
Tomar a mi vera un lugar,
Dejándola tomar cuanto pudiese,
Permitiendo ser un manjar,
Sin precedente entregué,
Un tesoro que no debí,
Y en su perdida descubrí,
La desdicha de vivir,
Un amor inconcluso,
Un deseo fogoso,
Un sentimiento en la duda,
Será o no será,
En esta vida,
En ardua trampa que es el amor….



No hay comentarios:

Publicar un comentario