CONFIDENCIAS DEL RECUERDO

El tiempo y la vida son una paradoja, por mas que el tiempo transcurra no es suficiente para el olvido, la vida es tiempo al fin y al cabo, ya que somos esclavos de éste, así como de nuestros recuerdos.

Recuerdos, da igual la época, siempre están ahí… plagando nuestra memoria de momentos felices o amargos, tristes o eufóricos, gloriosos o desesperantes. Da igual como los queramos catalogar, seguirán ahí, ya sea para nuestra devota añoranza o inusitada melancolía, así si, nunca será inusitada la desgracia y la pérdida de un ser querido, aunque creamos que quede en el olvido.

Siempre pensamos que el pasado es pasado, al menos eso nos dedicamos a declarar, pues bien, yo creo que a fin de cuentas forma parte de uno mismo, por lo que se hace presente para que no olvidemos, ni obviemos lo que en su momento aprendimos o decidimos ignorar, ya que la vida es una lección, siempre en constante movimiento, a veces muy rápida para el gusto de muchos o lenta para otros, eso depende de la época del ser humano, aunque todos crecemos con unas ideas y reglas, dictaminadas por nuestros progenitores, por la sociedad o por el ambiente en el que uno crece, se quiera o no ahí están, aunque nos neguemos a escucharlas, admitamos que lo hacemos muy seguido, ya que no se aprende ni se madura sin equivocarse, la cuestión a fin de cuentas, es hasta donde se puede equivocar el ser humano, hasta dónde es responsable…

Bueno, supongo que todo ésta reflexión creará un sin fin de objeciones, unas a favor otras en contra; de todas formas, todo tiene su razón de ser, al menos mi conciencia quiere creer eso, (pobre ingenuidad), primero para creer antes hay que saber, irónicamente para saber hay que haber vivido y visto….. Se dice que el anciano es sabio por su larga vida y ve lo que otros aún no han tenido ocasión, mi opinión es algo más particular o puede decirse que peculiar, la edad no hace a uno más o menos sabio,  simplemente le hace comprender, pues ha experimentado y aprendido en el transcurso de su vida, ya sea mas corta o larga, y tienden a ser mas comprensivos aquellos que han visto más de lo que uno mismo hubiera querido… Es decir si al monje no le hace el hábito, al sabio no lo hace la edad, es la devoción la que hace al monje y su entrega, al sabio, bueno éste no se ha de poner una barba y una toga para serlo, ya que uno llega a sabio en cualquier etapa de la vida, según lo que esta señora le haya deparado a uno mismo, y el como haya recorrido su camino, ya sea para bien o para mal, ya que uno puede aprender o aprovecharse.

Si muchos hubiéramos aprendido en su debido momento, quizás hubiera más sabios y menos desdichados, pero claro, no se puede esperar que todos seamos iguales, aunque a veces convendría, pero después de todo, por algo hay diversidad en la viña del señor, de otra manera no valoraríamos lo que nos rodea o somos, ni reconoceríamos en otros valores y defectos, de ésa manera seriamos muy aburridos.

Hay recuerdos amargos, como antes indiqué, pero que te traen al camino de la vida con conceptos muy definidos,  otros a los que no llegas por la educación que recibes e influencias, con los que creces de un modo más personal, aunque pienses de otra manera….(detestable adolescencia).

En la niñez no ponemos nada en duda, al crecer todo nos parece mal, (mundo idealista), esperamos hacerlo mejor, de mayores intentamos hacer las cosas lo mejor que podemos.

Yo, evidentemente, tengo muchísimos recuerdos y conclusiones, ante todo una historia llena de matices, que hoy en día pocos hogares se libran de haber experimentado, una mayoría antes o después se ven en ésa encrucijada, dónde la duda es una constante acosadora.

Muchos hogares crecen en un estado de ruptura, es decir, la idea de una familia es la de cuyos progenitores son tus padres y aquellos que deben de ser tu modelo a seguir, por desgracia, muchos crecen sin ése modelo, sino en el abrigo del cariño o el desprecio de un hogar secundario formado por familiares cercanos que ya sea en la suerte de ser acogida con el amor que te procesan o por el contrario el desagrado y la amargura de que te vean como un problema y una carga.

No debería ser así, menos que inocentes se vean en un fuego creado por el rencor y la incomprensión, que puede hundirte u hacerte mas fuerte, desde el momento en que empiezan a caminar entre esas voces que les acompañan hasta el día que llegan a rehacer su vida desde un nuevo punto de partida.

Pero muchos ignoran los recuerdos que albergan en sus memorias sin contar las influencias que recibieron y el como vivieron desde su fuero interno la infancia.

Hay recuerdos felices y amargos, unos te dan consuelo y otros te provocan tristeza, en esos casos es desesperante no tener nada mejor que recordar, ya que estos tienden a venir a nuestras mentes en los peores momentos en los que nuestro ánimo va de capa caída.

Toda familia tiene su historia, ninguna es igual a otra en estos casos pero si poseen un sinfín de similitudes, por las que unos y otros se sienten identificados, (ya me gustaría que no fuera así), sobretodo si poseen recuerdos de la misma índole en los que en ciertos momentos se sienten en confianza de compartir.

Y bueno digamos que puede que haya llegado el momento de compartir algunos de esos recuerdos, momentos vividos y pensamientos con los que tengo intención de formar mi historia, así que con humildad les pido paciencia, aunque bueno espero no sea mucho pedir…

En todo seno de una familia hay un triangulo, el eslabón fuerte, el eslabón neutral, y claro está el débil, la cuestión en todo caso es el como ve la persona a cada uno y como los calificas y por qué, unos piensan que el fuerte es el que lleva el mando en la familia, también es el que tiene el carácter mas fuerte y domina a quien los rodea, o peor el mas agresivo capaz de todo por que no se le lleve la contraría, el neutral…. Es mas el que pone paz, intenta que las cosas no se compliquen, lo valora todo desde un punto externo intentando no implicarse, no quiere estar por ninguna de las dos partes por que a ambas los adora, también puede ser el que evita implicarse por que no le importa nada lo que pase, solo da su opinión si no le queda más remedio, prefiere ir por su cuenta pero que le tengan atenciones por estar ahí, bueno supongo que os hacéis una idea muy poco halagadora…. El débil en cierta manera, al que le falta voluntad, no ve salidas, hace lo que se le pide por no discutir, ante todo parece un ratón asustadizo, también es aquella persona que por razones de la vida a perdido esperanza en algo mejor y por lo tanto el interés por todo y le ha dejado de importar casi todo, mayoritariamente su mayor punto de apoyo el cariño de quienes le rodean es su fuerza y sin ésta se sienten inútiles….

Lo mismo en cierta manera mi opinión no es la más adecuada, pero no es un único punto de vista, en todo seno hay una variante más personal que sólo los que la viven en primera persona la pueden definir con más criterio, de los que a fin de cuentas nosotros somos unos intrusos.

Han pasado muchos años desde éstos sucesos, eso no se puede negar, yo por aquel entonces no era más que una niña, en el arropo del cariño de mi abuela y de las escasas visitas de mi madre, y como cualquier criatura mi mayor deseo era su cariño, verla más y no sentirme distinta a los demás.

Yo no era la única en ése seno familiar que crecía entre el cariño y el rechazo de las circunstancias de nuestra infancia, y de ser unas personitas sin culpa a ser también una carga o un problema, también se da el caso de ser la razón de lucha en una familia o miembros de varias familias, algo bien desagradable ya que la paz duraba poco,  y no se tardaba en verse una lucha constante entre aquellos que amamos y aquellos que dicen que nos aman, entre el rechazo y la obligación de lo que se creía abrir los ojos que era más un despecho por errores y problemas que terceros hubieran causado y que siempre repercutía en aquellos que no eran responsables, pero si los definían como tales, hasta el punto de opinar que se debía dar la espalda a quienes unos amaban, y otros resentían, pero en verdad, la gente piensa que es decir pensar y hacer, y no es así, uno puede saber, pero también sentir y muy seguido una persona ignora lo que sabe por ayudar a quien se ama, aunque no se deba, aunque se use el mejor criterio, aunque uno se equivoque cara a los demás, pero para esa persona es la manera que tiene de estar a su lado, aunque le duela y sufra, ya que siente que cada soplo de vida que otorga es un paso mas hacia un futuro que no se puede ignorar, es consciente de que va a perder a este ser querido, que no es seguro en que circunstancias, tampoco cuánto tiempo, lo único claro que su vida está pendiente de un hilo entre su presente y el otro lado, mientras sufre la decadencia y la enfermedad en la que se ve implicada esta persona, ya sea por un amor, una mala decisión, la debilidad personal, el ser defraudados por la persona en la que más se confía, e incluso por ser engañado por terceros, por que sí uno peca de seguridad y se convierte en esclavo de la droga, y esta alimaña no perdona edad, sexo u condición, no es mas que una sanguijuela que le va quitando la vida a quienes ingenuos sirven a engordar las arcas de sus propietarios, así como quitar la vida y la salud de sus adictos consumidores, y por ende romper la unión familiar de éstos y su vida social, ya que se convierten en leprosos de esta misma…

Una madre lo da todo por un hijo, pierde el orgullo por cuidar de este incluso en los momentos mas desesperados de la vida, lo peor es ver como también pierde su existencia su personalidad en pos de la tristeza, de ver como el miembro mas joven de su prole desperdicia su vida así, es consciente de sus grandes dotes y que de ninguna va a vivir por que ya tiene su vida sujeta por una marabunta que la carcome por dentro, anulando ya de por si su voluntad y que lo único que ya tiene en esta vida es el cariño de una madre y unas hijas cuyo único deseo es verla en casa para agasajarla de ese amor incondicional que la profesan.

Día a día en la duda, del que será, día  tras día en la espera de noticias sobre ella, es el miedo de la terrible noticia de perderla, el desconsuelo de la critica del resto de miembros que no admiten que siga a su lado, ya que es una perdida sin remedio, si la quisieron, la admiraron y adoraron de niña, pero todo quedó en el pasado y para ésta mujer ese pasado es lo único que le queda, de su tesoro, todos hicieron su vida y la pequeña ha sido la única que no tuvo tal bendición y por la que sufre en silencio, por la que lucha incansablemente, contra todos los que la reprenden por hacerlo y se mantiene firme, no cederá, mientras le quede un soplo de vida seguirá ahí cuidando de ella, sabe que no la puede ayudar si ella no se ayuda, pero también que ella es la única que la mantiene viva, que es su único salvavidas y no le va a dar la espalda por nada del mundo, tiene una familia por la que luchar, unas nietas que le dan fuerzas con solo existir y le recuerdan solo con estar ahí, que todavía hay ilusión y un futuro….

Son unas niñas que ven en el transcurso de cada momento el conflicto, el dolor, la lucha, el ansia, la desesperación todo cuanto trae a un hogar una existencia como ésta, en el consuelo de que tienen a su abuela y que no están solas, en el consuelo de que pronto verán a su madre y le demostrarán cuanto la quieren, en la ilusión de hablar con ella, escribirles cartas, salir por ahí alguna vez, por escasas que fueran estas ocasiones tenían la fortuna de compartirlas y disfrutar de todas sus atenciones y cariño, que era todo cuanto éstas criaturas deseaban.

Por desgracia no era lo único con lo que crecían, también con una educación antigua en que no se conversaba de temas con los adultos y por supuesto se vivía en la ignorancia de mas de un asunto, también en el horror de escuchar las barbaridades de los hechos que se acontecían y provocaban el encarcelamiento de la madre, en la agresividad de una educación anticuada, en el rechazo de tener una madre así, como en el de no poseer las mismas facilidades que el resto de niños en el colegio, como es en si el material escolar por el que tanto unos u otros se criticaban u rechazan e incluso idolatraban, lo peor ser digno de lástima….

El mayor desahogo era aislarse de tanto mirando la tele y soñar con algo distinto, vivir y luchar por lo que uno creía u veía correcto, sin darse cuenta que poco a poco, esa criatura estaba aprendiendo a luchar y a aguantar lo que llegara sin dejarse arrastrar por los conceptos de los que la rodean, pero nadie es invulnerable y por lo tanto mucho dolor acumulaba viéndose acosada por las palabras y hechos de una madre que en si amaba y en la que podía ver que era lo único que tenia, aunque no llegara un futuro en el que pudiera estar a su lado, como cualquiera de sus compañeras y conocidas que si tenían esa suerte.
****
Por desgracia el pilar de este núcleo familiar tenia una batalla perdida, su salud era delicada y con tanta carga con el tiempo cada vez estaba mas dañada, ya no solo se vivia la desdicha de una madre toxicómana, la vida trae pruebas que no siempre se pueden superar y esta mujer lucho y se mantuvo firme mucho tiempo, pero su salud no salió indemne, en varias ocasiones salvó este obstáculo en el hospital pero con un pronostico muy poco favorable, todos intuían que en algún momento esa fuerza que la mantenía en pie, desaparecería y seria el día que ella perdiera la vida, dejando a todos desconsolados, pues nadie tomo en cuenta un detalle muy simple, todos la veían débil por luchar por alguien que ya no tenía futuro, y todos se apoyaban en ese alguien, todos fueron unos ciegos al pensar que dependía de ello y éramos todos los que dependíamos de su fuerza de voluntad y amor, de su entrega y fe, de ese carisma que con la calma que demostraba se mantenía firme ante lo que llegara con ese criterio que pocos entendían, o juntos o nada, como una guerrera que no permitía que se separara su tribu, con una única condición en su vida, mantenerlos a todos unidos por muy equivocada que todos pensaran que estuviera, ciegos ante la mayor fortaleza del mundo, el de una madre y abuela que lucha por el amor que profesa. Se mantuvo firme contra viento y marea, un viento que trajo palabras hirientes y jamás consiguieron que retrocediera ni dañara su determinación ni esa marea que era la vida, que por mas oleaje de problemas, ella se mantuvo firme ante cualquiera que quisiera moverla de su lugar, aunque derramara lágrimas nadie pudo contra esa fuerza que era mayor que la vida misma, la cual al final se llevo la de ésta persona, digna de admirar y recordar, y digo recordar por que muchas son las que se mantienen contra todo pronostico soportando lo insufrible, por cumplir su deseo y voluntad de estar al lado y dar cariño a la persona que más lo necesita, aunque otros piensen que no lo merezca, por que precisamente por eso más falta les hace, por que nadie tendrá compasión ni recordarán las personas que fueron, solo aquellas que ponen su amor por encima de todo, sus madres, y tal como dicen, madre solo hay una y ojalá las cuidásemos tanto como se merecen.

Se crece en un seno familiar, deseando tener lo que todos poseían, descubriendo con los años que aún no teniendo un ejemplo a seguir como el resto, se nos inculcó el sentido de luchar y amar a quienes nos rodean, a no depender sino valernos por si mismos, levantándonos una y otra vez por mucho que nos cueste…. Y en el fondo se hacen preguntas, ¿cómo seria teniendo una familia normal?, ¿en que habría cambiado?, ¿Qué habría echado en falta?, ¿Qué seria de esa madre sin la droga?, ¿Qué sería de esa abuela sin esa lucha?..... Son preguntas, son dudas, son tantas cosas, que no creo que nadie se de cuenta hasta dónde puede ver una criatura, comprender y llegar a aprender, en infancias como estas, es complicado y para muchos lo de…..”Pobrecita, que lastima….” Es como otra piedra que te lanzan, recordándote  lo que no tienes y que eres distinta, no debería ser así